1. Identificar la idea a emprender
Bienvenidas al punto inicial de cualquier emprendimiento, ¡que sois vosotras mismas!
La motivación que os lleve a emprender, sea cual sea, os llevará por un camino en el cual la idea inicial irá tomando su propia forma. Las ideas en su desarrollo tendrán cambios que mejoren su puesta en marcha y puedan hacerse realidad.
Aquí tenéis algunas orientaciones, herramientas para el camino:
Motivación
Puede haber múltiples causas para emprender. Una mirada honesta y profunda de vuestros propios motivos os dará coherencia y además, será la fuente a la que volveréis cuando os puedan surgir obstáculos. Es un proceso personal y colectivo fundamental, que requiere su tiempo y revisión permanente.
Aquí tenéis una guía para organizar muchas preguntas que surgen a la hora de emprender:
¿Es vuestro momento de emprender? Este punto merece una reflexión personal y grupal. El contexto personal puede afectar a la hora de dedicar tiempo a vuestro proyecto. Las mujeres en algunos casos necesitan apoyos para destinar horas a un nuevo proyecto.
Puede que estos vídeos os resulten inspiradores (atención a los “consejos”):
Por último, compartimos algunas técnicas individuales y grupales, que pueden ayudaros en estas reflexiones: Brainstorming, provocación, atributos, scamper, mapas mentales.
Concretamente, estas dos herramientas podrán ayudaros al proceso creativo de vuestra idea de negocio:
Potencialidades: ¿Cuál es mi sector?
Para ir definiendo los productos/servicios que ofreceréis, resulta interesante pensar en qué sector encajarían. Quizás vuestra idea revolucione ese sector, sea una evolución o mejora de lo que ya existe. Este vídeo seguro que os ayuda a mover ideas.
Definir objetivos
Autogestionar los plazos y objetivos os ayudará a avanzar en la concreción de vuestras ideas. Construir mapas mentales de relaciones, son algunas técnicas que os ayudarán a planificar este proceso inicial.
Si sigues las flechas, encontrarás más herramientas
Aportaciones
¿Qué aportáis al emprendimiento? La experiencia, el conocimiento, los recursos compartidos, el trabajo en común. Dentro del proyecto, el aporte personal enriquece y completa la propuesta ¡y os implicará más aún!.